domingo, 1 de abril de 2012

BLOQUEO

Bloqueo de vía en Bolivia. Foto de Internet
Una de las palabras que más he escuchado en mi vida ha sido BLOQUEO, tantas veces que  creo que hasta en algunas, mi mente ha sido bloqueada.
Es muy común leer o escuchar en Cuba la frase "bloqueo imperialista", refiriéndose a lo que muchos prefieren llamar embargo. De todas formas y aunque ese se siente es algo intangible, ósea que no se ve claramente ese acto de bloquear.
La curiosidad me hizo buscar el significado de esa palabra, por aquello que de pronto no fuera lo que yo pensaba, así que brevemente agrego algunas de las  definiciones que encontré:
La palabra Bloqueo puede referirse a:
Bloqueo como estrategia militar; al sistema de bloqueo en el ámbito ferroviario;  al bloqueo en el deporte, acciones encaminadas a interceptar cualquier ataque del equipo contrario en un partido, por ejemplo en voleibol;  bloqueo en informática, también conocido informalmente como baneo (del inglés to ban, prohibir);  bloqueo anestésico o lo corregional al que se sujeta un paciente durante una intervención quirúrgica...
Ya iba a cerrar la siempre auxiliadora wikkipedia cuando descubrí la definición que  aparece a continuación, de verla solo pensé: - esa es la que es .
Bloqueo de vías de comunicación terrestre, una medida de fuerza utilizada por los más diversos sectores sociales con el fin de protestar o realizar reclamos.
Por supuesto que eso sí es un bloqueo, un bloqueo tangible, palpable, excitablemente sensible, un bloqueo sin objeción alguna, a la vista de todos los ojos.
No sé si los bloqueos se inventaron en Bolivia, pero estoy seguro que si hubiera una olimpiada mundial, este hermoso país obtendría sin dudas el primer lugar y a nadie se le ocurriría bloquear objetándolo.
Aquí se bloquea por todo, lo mismo por una demanda política, económica o social. Hasta un desesperado enamorado pidiendo que su amada lo perdone es capaz de bloquear la entrada a su calle.
No importa  si llueve, hace frio o calor, nada es capaz de impedirlo con la sola objeción que no sea en tiempo de carnaval, o de la FEXPO en el caso de Santa Cruz. Bloquear calles y carreteras de Bolivia es algo cotidiano, parte del paisaje, fuente económica para canales de televisión que sin bloqueos tendrían pocas noticias, para vendedores ambulantes  que hacen su agosto en los límites al paso, impuestos a golpe de golpes (valga la redundancia), pinchada de llantas, arboles y pedruscos esparcidos por el área designada para bloquear.
Pero el bloqueo no es chiste, trae un considerable perjuicio económico que en muchas ocasiones ni afecta a los demandados, por eso algunas veces he preguntado por qué no se legislan leyes para evitar o al menos atenuar este mal y siempre tengo por respuesta que es la única forma de que escuchen a los que reclaman algún derecho u otra cosa. Otros más precisos con una irónica sonrisa me responden: -Ya puej , hombre ¿cómo le va a pedir a Bill Gate que proscriba Windows?
Esa actitud se ha vuelto algo así como un chantaje y duele ver camiones detenidos días y días cargados de alimentos que se pudren o animales que mueren por falta de agua. Mujeres, ancianos y niños caminando grandes distancias en busca de algo que lo adelante pues el bus o el vehículo que los transportaba quedó del otro lado del bloqueo.
Una vez vi un bloqueo en medio de la ciudad, se trataba de unos estudiantes que protestaban por algo que no entendí bien por la gramática de sus carteles con varias faltas ortográficas, bloqueaban una importante vía de cuatro sendas, aunque prefirieron, tal vez por falta de quórum, solamente interrumpir una para perjuicio del transporte público que transita  normalmente por esa. Lo más significativo de aquella protesta bloqueadora lo descubrió uno de los pasajeros del micro en que viajaba cuando dijo; - ¿pero de qué pueden protestar esos pelaos si  aurita están de vacaciones en la universidad?
Así funciona esa táctica, bloquear aunque a veces ni se sepa por qué, pero de esto hay mucha tela que cortar y mejor no sigo no sea que me vayan a bloquear.


No hay comentarios:

Publicar un comentario