lunes, 15 de septiembre de 2014

El audiovisual acerca de niños con necesidades especiales

Fotograma del documental "Toda la felicidad de la vida"
En una etapa de mi vida, me tocó la hermosa tarea de realizar trabajos audiovisuales acerca de centros de estudios en Cuba, para niños con necesidades especiales. Fue una experiencia profesional inolvidable que me dio muchas satisfacciones y sobre todo contribuyó a la sensibilización, tanto para mí, como los demás integrantes de mi equipo de trabajo, con esos niños, adolescentes y todas las personas en general,  que necesitan  mucho más de todos nosotros.  Es por ello, y por ellos, que reproduzco (con algunas pequeñas correcciones), lo que fue mi primer escrito publicado en Internet, hace algunos años, cuando ni siquiera tuve la oportunidad de leerlo.

Realizar un audiovisual donde intervengan de forma protagónica niños, es un trabajo hermoso, pero a la vez muy difícil. Los pequeños cuando sienten preferencia e interés por lo que están haciendo colaboran a las mil maravillas manteniendo buena disciplina, pero cuando no tienen o pierden el interés, la motivación o simplemente sienten cansancio, con la mayor naturalidad se niegan a seguir y entonces empieza la catástrofe. Es este el momento en que los realizadores tienen que dejar a un lado guiones, cámaras, luces y micrófonos para echar a mano todo lo que tengan de paciencia, asumir el rol de psicólogos infantiles y hacer volver a los niños al set.
Esto ocurre con mucha frecuencia, sobre todo cuando lo que se realiza es un documental en el cual de forma reiterada se hace imprescindible la repetición de planos, cambios de encuadre, de iluminación, de tomas de audio u otros elementos de índole técnica y artística que se presentan normalmente en una filmación y que se incrementan con las condiciones naturales de frío o calor en exteriores o por las potentes luces en interiores. Todo esto se hace más complejo aún, cuando el material está relacionado con niños con necesidades especiales.
Para la realización de documentales con niños de estas características deben tenerse en cuenta diferentes aspectos de índole general y particular por cada especialidad, que harán menos compleja esta tarea.
Dentro de los aspectos generales es necesario ante todo llevar a cabo una minuciosa investigación antes de confeccionar el guión, esta deberá hacerse in sito, conjuntamente con los asesores, entre los que deben estar incluidos profesores, psicólogos, psicopedagogos y representantes de la dirección de la escuela, para conocer las principales características del problema que presentan estos niños y en qué consiste el tratamiento.
Es importante crear una estrecha relación entre el equipo de realización y el personal del centro escolar con el objetivo de que el trabajo, en las etapas de pre-producción y filmación, fluya lo mejor posible. Ya desde la primera etapa señalada, es necesario que el equipo de realización se relacione, y aún más se sensibilice con los niños que participarán en el audiovisual.
La relación con los padres o tutores de los pequeños es de apreciable importancia. Ante todo estos deberán estar de acuerdo con el trabajo donde participarán sus hijos. Su apoyo así como su influencia hacia los niños integrados al proyecto tienen una incalculable connotación humana, ética y práctica que incidirá de forma totalmente favorable en el resultado final.

Otro aspecto importante consiste en que el trabajo se haga en la misma escuela y ambientes en que estudian los niños. No se debe trasladar a los pequeños a estudios de televisión u otra locación desconocida para ellos.
Una vez precisados los aspectos anteriores se procederá a estructurar el guión teniendo en cuenta prever las locaciones escogidas, la actividad y hora en que se filmará, así como el orden, la ubicación de equipos y todo lo que pueda agilizar el rodaje.
Cuando se filma un audiovisual que incluye niños con necesidades especiales,  gran cantidad de secuencias se hacen en toma única, ya que es muy probable que se precise tomar un tipo de conducta la cual no habrá posibilidad de repetir (tomando en cuenta las características de los niños y su comportamiento impredecible en algunos casos), por lo que el personal escogido para este tipo de trabajo debe ser experimentado y el equipamiento técnico estar en optimas condiciones con el fin de evitar interrupciones que puedan malograr una secuencia irrepetible. Un fuera de foco, un ruido ajeno o una sombra que no corresponda, no debe ser óbice para detener el trabajo. Estos detalles, aunque perceptibles, pueden eliminarse durante el proceso de post-producción. No obstante, si no fuera posible enmendar esta deficiencia técnica y la secuencia donde ocurrió lo amerita, puede aparecer en el resultado final, y el espectador comprenderá seguramente el valor de la secuencia frente a estas deficiencias fortuitas.
La selección de los niños que intervendrán en el documental se hará conjuntamente con los asesores, teniendo en cuenta que sean los más avanzados en el aprendizaje correspondiente, así como en el tratamiento aplicado. El aspecto físico es también importante, aunque depende de lo anterior. No es necesario, si no lo requiere el contenido científico o didáctico del material, hacer énfasis en imágenes que resalten defectos físicos, tampoco es recomendable estimular sentimientos de lástima o compasión en el espectador.
El audiovisual didáctico sobre educación a niños con necesidades especiales, debe hacerse comprensible para los especialistas, la terminología científico - técnica no debe obviarse, aunque si este material ampliará su horizonte a un público más general (padres, maestros y otros) pudiera requerir que su significado sea explicado brevemente de forma tal que se facilite su comprensión por este público al cual no estaba dirigido.
En la etapa de rodaje, el desarrollo de las diferentes actividades por lo general se efectuará en el mismo lugar que se hacen cotidianamente. La sesión de trabajo nunca se extenderá de forma tal que los niños puedan sentir agotamiento. Solo debe permanecer en la locación el personal requerido.

El audiovisual donde intervengan niños con necesidades especiales, no solo consiste en aportar conocimientos a personas que trabajan con ellos, también debe estar dirigido a sensibilizar a todos sus posibles espectadores, para que sepan que ellos también existen y nunca queden excluidos de sus miradas.